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La estatura mental de César Hildebrandt II

Publicado: 2010-10-24

No es que me haya obsesionado con César Hildebrandt, pero a veces se me cruza en el camino, y aunque trato de evitarlo por una cuestión de salud mental, en un descuido acabo leyendo sus enfermizas columnas. A pesar de que escribe muy bien, sus columnas sólo sirven para regar su hiel, sembrar desazón, intrigas, sospechas, acusaciones, etc. Ese tipo de periodismo me cansó hace tiempo. Me voy a tomar la molestia de ocuparme nuevamente de este señor, aun sabiendo perfectamente que me voy a comprar líos, porque hay toda una feligresía que lo sigue, marchando como sahumadores de su prédica. Tampoco censuro sus comentarios por más bajos que sean.

He recibido por correo uno de los artículos de César Hildebrandt. No es la primera vez que me llegan, ya que al parecer existe una porción de nuestra sociedad que se solaza con esta clase de sentimientos empobrecidos y de ideas limítrofes, embadurnadas de solemnidad moral e intelectual. Esta vez se trata de un artículo que titula "Compre peruano (¿dónde?)", y que al final ha sido completado con la más histérica prédica antichilena, y el consabido "comparte este mensaje con tus amigos" supuestamente para "construir una conciencia nacional". Para los que no han leído ese artículo ni les ha llegado aun el correo, lo adjunto al final. Así que bien pueden empezar por el final para que tengan una mejor idea de a qué me estoy refiriendo.

Empezaré diciendo que si yo tuviera que responder al Presidente por su invocación de comprar productos peruanos, le diría simplemente que yo, como consumidor, solo estoy interesado en comprar productos de calidad. No compro una pasta dental porque es peruana ni la dejo de comprar porque es chilena. La compro porque es una buena pasta dental, que me protege la dentadura y me da buen aliento. Ese es todo el sano juicio de un consumidor. El resto son complejos idiotas.

Toda la visión del mundo que nos muestra César Hildebrandt en este artículo, es la visión típica de un aldeano. Es decir, de alguien que no ha salido de su tribu y que no tiene la más remota idea de lo que es el mundo globalizado moderno. Aunque el mundo es así desde hace más de medio siglo, pero algunos no se han enterado. César pretende responder al Presidente García, quien ha invocado a los peruanos a comprar productos peruanos. Entonces César se pregunta ¿dónde? Y luego menciona una lista de marcas y empresas extranjeras que existen en el Perú. Así es como desata su delirio chauvinista y nadie se escapa de su látigo purificador. Ni la Inca Kola, ni D'Onofrio, ni Pilsen ni la Cuzqueña. Todos son pecadores extranjeros que hay que quemar, al más puro estilo talibán.

¿Qué es lo que quiere mostrar César Hildebrandt? ¿Qué es lo que le molesta en el fondo? ¿Qué propone, qué plantea? ¿A dónde quiere llegar con su prédica chauvinista? Tal vez sueña con un país en el que todo sea peruano sin nada extranjero, evocando los tiempos de Velasco Alvarado, que expulsó incluso a Supermán y al Super Ratón, junto a la pequeña Lulú  por ser símbolos del imperialismo. Gracias a un enfermizo fervor nacionalista, con Velasco el Perú se llenó de empresas estatales que tenían todas el nombre del Perú: Petroperú, Aeroperú, Siderperú, Enapuperú, etc. Eso no impidió que todas quebraran porque estaban manejadas por puros generales mediocres que, de empresas, no sabían absolutamente nada, tal como ocurre hoy en Venezuela, donde los alimentos se pudren antes de ser repartidos y las plataformas petroleras se incendian cada fin de semana. Ese patológico nacionalismo extremo no sirve para nada, salvo para quebrar a un país; pero es el que algunos añoran hoy y el que parece predicar César Hildebrandt como trasfondo.

Me da mucha pena que los peruanos perdamos miserablemente el tiempo discutiendo temas tan ridículos, como la nacionalidad de los capitales que son dueños temporales de una empresa. Vamos a ir por partes para que los que no se dan cuentan puedan advertir lo absurdo del nacionalismo, tal como es entendido y planteado por algunos.

En cualquier lugar del mundo civilizado se encuentran empresas de todo el mundo. No sólo en el Perú hay empresas y marcas de todo el mundo, como tiene que ser. En Chile sucede algo muy parecido. Si uno entra a un supermercado en EEUU, lo que va a encontrar son básicamente productos extranjeros, hechos en Malasia, Taiwan, China, Honduras, Filipinas, Japón, etc., y hasta en Perú. Para colmo, hasta los souvenirs que se compran en cualquier ciudad de EEUU son hechos en China. Las empresas que actúan en los EEUU son de todo el mundo, muchas de ellas son socios de la NASA. En EEUU hay grandes inversiones árabes, chinas, rusas, etc. La gente consume cerveza Budweiser alemana, Heineken holandesa, Corona mexicana, Lite americana y hasta Cuzqueña, que para todo el mundo es peruana, aunque César Hildebrandt diga que no. Y así es en todas las marcas y productos, hay de todo el mundo y para todos los gustos. Esa es la ventaja del libre mercado. ¿Algún norteamericano ha reclamado por su nacionalismo? No. Jamás, porque ellos no se preocupan por esas tonterías. Entienden que eso es parte natural de un mundo civilizado y del libre comercio. Compiten sin traumas y van para adelante.

En el Perú también tenemos marcas y empresas que están presentes en otros países. El ejemplo más reciente es AJE, que tiene fábricas en Chile, México, Guatemala, Nicaragua, Venezuela, Ecuador, Costa Rica y Tailandia; y próximamente en Brasil. Varias otras empresas como GYM, Gloria y Credicorp también están afuera. Lo que podría hacer el señor César Hildebrandt es tomarse el trabajo de buscar a las empresas peruanas que están creciendo y expandiéndose, para felicitarlas, presentárselas a sus lectores y alentar a los peruanos, en lugar de regar sus frustraciones y complejos, entregando a sus lectores un nacionalismo enfermizo.

Por otro lado, las empresas, al igual que cualquier cosa en este mundo, se compran y se venden. El hecho de que Wong haya sido peruana, no ha impedido que se venda. Y el Grupo Wong ha hecho inversiones en Chile. Las empresas se venden a veces completas y a veces por partes, en cualquier momento y al mejor postor. En ese proceso, en algún momento pueden ser mayoritariamente de capitales chilenos, luego pasar a ser mexicanos o alemanes. EN EEUU nadie se cortó las venas cuando la SONY del Japón compró la emblemática Metro Goldwing Mayer de Hollywood. Ahora SONY es dueña también de Columbia Pictures. ¿Alguien en EEUU se ha preocupado por esto? Veamos el caso de algunas empresas emblemáticas del mundo.

Lanborghini, una de las marcas de auto más emblemáticas de italia: Dueños: Chrysler (EEUU) 1987-1994; Megatech (1994-1998); Audi-Volskwagen (Alemania) hoy.

Bentley, auto emblemático del Reino Unido. Dueño actual: Volskwagen de Alemania.

Volvo, marca emblemática de autos y camiones sueca. Dueño previo: Ford Motor Co. (EEUU). Dueño actual: Geely (China).

IBM, histórica marca de computadoras de EEUU. Dueño parcial actual: LENOVO (China).

Dejémoslo allí porque la lista es de nunca acabar.

Si el señor César Hildebrandt fuera más inteligente, en lugar de predicar un chauvinismo retorcido, podría acudir a la Bolsa de Valores y comprar acciones de Microsoft para ser uno de los dueños de la empresa más grande del mundo, a ver si así se le aplacan los complejos.

Es verdad que en el Perú aun no tenemos la cantidad de empresas grandes que necesita un país grande. Porque hay que entenderlo bien: un país crece cuando crecen sus empresas privadas. No cuando crece el Estado. Son las empresas privadas las que le dan dinamismo a la economía. Y lamentablemente en el Perú se satanizó durante mucho tiempo a la empresa privada. Una prédica que -nuevamente hay que decirlo- empezó en el desastroso gobierno de Velasco Alvarado, cuyo mayor logro fue difundir el odio social, traerse abajo a todas las empresas nacionales y dividir a los peruanos entre "buenos" y "malos". Desde entonces y durante mucho tiempo hubo una guerra ideológica en contra de la empresa y del empresario en el Perú. Guerra que se tradujo en leyes absurdas que solo provocaron desempleo y subempleo. De allí que hoy el 70% de la actividad económica del Perú se desarrolle en la informalidad, a pesar de la montaña de leyes que lo regulan todo. Pero mientras satanizaban a las empresas privadas en el Perú durante los 70 y 80, en Chile se hacía todo lo contrario: se formaba al empresariado que hoy nos ha invadido. Esa fue toda la diferencia. Pero hoy volvemos a escuchar las voces que satanizan a la empresa privada. ¿Hasta cuándo?

Ahora que se ha recuperado el segmento empresarial y las empresas peruanas han aprendido a exportar y a invertir en otros países, solo hay que alentarlas, y no permitir que vuelvan al poder los políticos de antes, que aun siguen ideologías fracasadas del siglo pasado. Hace poco me reuní con jóvenes empresarios que acaban de ingresar a un segmento de Gamarra, ya están exportando a Centro América y tienen grandes planes para expandirse. Esa es la clase de gente que necesitamos para surgir como país. No los derrotistas ni los alarmistas. La única solución para enfrentar la invasión de empresas chilenas es crecer, tener más empresas, y empresas cada vez más grandes, lograr superar a los chilenos en eficiencia y capitales y llegar a Chile y a otros países, como han llegado ya varias empresas peruanas. Ya es hora de que las MYPES dejen de ser MYPES y se conviertan en grandes empresas. La única opción para vencer el subdesarrollo es crecer. Y la única forma de crecer es tener más empresas y empresas más grandes, lo cual significa tener más empresarios exitosos. A mayores empresarios y más empresas, más trabajo para todos.

Así que mi concejo a los seguidores del señor César Hildebrandt es que no se asusten con las empresas chilenas ni de otro sitio. El periodismo de "francotirador" que desde lo alto de su torre se dedica a dispararle a todo el mundo, me parece de mal gusto y poco valor. Ocuparse de señalar fantasmas, despotricar contra todos y acusar a todos, para erigirse como la conciencia moral del país, no pasa de ser una pose. Al final todo queda en la finta demagógica de quien se quiere vender como el más puro periodista del país. Puede que César sea insobornable, bien por eso, pero no es lo que estamos criticándole. Una persona inteligente puede hacer algo más que eso.

Acá reproduzco el texto del correo, con el artículo de César Hildebrandt. Un verdadero correo basura.

COMPRE PERUANO (¿pero dónde?)

Por César Hildebrandt

Es interesante que el doctor García recuerde que hay industria nacional y mercado interno justo en el momento en que la crisis internacional puede resentir las exportaciones y alterar la tasade ganancia de los barones de Adex. En esa lógica, vamos a tener que atragantarnos de espárragos.

Es como si el Presidente dijera:

“peruanos, ayuden a sus empresarios que ya no pueden colocar todas sus mercancías en el exterior; acabo de reparar en el hecho de que el Perú existe todavía y de que no era cierto que se lo había llevado un viento global”.

Yo también quiero comprar peruano. El problema es que me rompo la cabeza y sólo encuentro a Sapolio como ejemplo.

¿Vamos a Ripley a comprar peruano? ¿No es chino todo allí? ¿Y no es chino en Saga? ¿Chino y reetiquetado?

¿Ayudará a la causa comprar una lata de atún Florida, ése que alguna vez fue peruano?

¿En la chilena Sodimac habrá cosas peruanas? ¿O en la americana Home Center?

Y si me enfermo mucho, ¿a qué farmacia voy a consumir productos peruanos? ¿A la chilena Fasa? ¿A la chilenaInkafarma?

¿O quizá en la chilena Wong encuentre lo que espero?

¿Si viajamos por la empresa LAN, colaboramos? ¿O será mejor en la costarricense TACA?

Y si hablo mucho por teléfono, ¿hago patria? ¿ConTelefónica, con Claro, con Néxtel, osea Cortés yMoctezuma en brutal combate?

Y si recorro más la ciudad, ¿dónde me abastezco de gasolina para complacer al señor presidente de la República? ¿En la española Repsol o en la mitad chilenaPrímax?

¿Dónde, en qué kilómetro, de qué carretera queda el centro de servicios Petroperú más cercano?

Y si tomo más cerveza, ¿a quiénes prefiero? ¿A los anglosudafricanos de Cristal, Pilsen y Cusqueña? ¿O me pongo regional y elijo a los belgabrasileños de Ambev? ¿O me pongo viajerazo y me tomo una Corona mexicana fabricada en Chile? ¿O ultramarino y me tomo una italiana Peroni fabricada en Lima por los anglosudafricanos dueños de la Backus?

¿Comeré muchos helados D'onofrio hechos por la suizaNestlé? ¿O me bañaré más de la cuenta con jabón Lux o jabón Rexona del grupo angloholandés Unilever?

¿O me hincharé de Inca Kola, firma cuyo 60 por ciento de acciones fue comprado, en 1999, por The Coca Cola Company, que pagó 300 millones de dólares por la operación?

¿Los zapatos más baratos no están en Payless? ¿O en la checa Bata?

¿O me mudo a Arequipa para encender la luz y favorecer a la colombiana REP, que acaba de potenciar la línea Mantaro-Socabaya?

¿O le pido un autógrafo al lobista estadounidense PPK? ¿O envío un S.O.S. a la Apec?

¿Cómo colaboro con usted, doctor García?

¿Me voy a Collique a ver cómo han extraído los chilenos y su amigo Pepe Graña el busto de Quiñones mientras mastico un chocolate Costa?

Doctor García: usted es redundante. Eso de “compre peruano” ya se lo había dicho usted antes a sus amigos chilenos. Ahora es un poco tarde como mensaje “de bandera”, señor Presidente. Porque para dar mensajes de bandera hay que creer en la propia.

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A continuación tan solo una parte de las sandeces que se adjuntan al mensaje:

Si leen esto, se darán cuenta que Chile es un pais en vía de desarrollo y que son capaces donde los otros no lo son, este mensaje es una prueba de ello, aunque les pese es verdad...

Este es el ¨ANUNCIO¨ que le ha sacado ronchas al gobierno chileno, motivo por el cual están tratando por todos los medios que no circule..   REENVIALO A TODOS tus amigos en el Perú, y, mejor aún, en el extranjero.

Antes de adquirir cualquier producto verifica el código de barra, todos los productos NETAMENTE peruanos empiezan con los números 775

No compres los que empiezan con 780 son chilenos.

'CONSUME LO QUE PRODUCE EL PERÚ'

'GENERA UN EMPLEO'

'DESTERREMOS LA POBREZA

EN NUESTRO PAIS'

COMPARTE ESTE MENSAJE CON TUS AMIGOS.

COLABORA CON LA CONSTRUCCIÓN DE UNA CONCIENCIA NACIONAL.

AUMENTA LA LISTA DE PRODUCTOS QUE NO DEBEMOS COMPRAR A LOS CHILENOS. OJO..., SODIMAC, TOTTUS, ETC

RECIBÍ ESTE CORREO Y CREO QUE DEBEMOS CONTRIBUIR CON EL CONSUMO DEL PRODUCTO NACIONAL SI QUEREMOS QUE NUESTRO PERÚ SALGA ADELANTE....

ESTO ES UNA GUERRA ECONOMICA  Y NOS AFECTA A CADA UNO DE NOSOTROS.

SI DECIDES NO REENVIAR ESTE MENSAJE NO SE VA A MORIR NADIE DE TU FAMILIA NO TENDRÁS 100 AÑOS DE MALA SUERTE. SOLO HARÁS QUE LOS CHILENOS SIGAN MANDANDO SUS GANANCIAS A SU PAÍS.  NO SOLO LE GENERARÁS MÁS GANANCIAS, SINOFAVORECERÁS LA COMPRA DE MÁS ARMAMENTO.


Escrito por

Dante Bobadilla Ramírez

Psicólogo cognitivo, derecha liberal. Ateo, agnóstico y escéptico.


Publicado en

En busca del tiempo perdido

Comentarios sobre el acontecer político nacional y otros temas de interés social