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Vida y milagros de Ollanta Humala

Publicado: 2011-01-15

No solo Juan Pablo II parece hacer milagros. Ollanta Humala también tiene que hacerlos. De otro modo es muy difícil explicar la gran vida de rey que se gasta sin tener trabajo, entre otros hechos milagrosos. Claro que sobrevivir sin un empleo es una hazaña que muchos peruanos realizan cotidianamente. Pero vivir como rey es otra cosa. Ni siquiera su pensión militar de S/. 2,780 soles justifica los lujos que Ollanta Humala luce sin discreción. Ni aun si le sumamos el sueldito que sus congresistas le dan como pago por haberlos puesto en su lista, y que -según diferentes confesiones- oscila entre 6,000 y 3,000 soles. Aunque lo más probable es que bordee los S/. 30,000. Esto sí podría explicar en algo sus extravagantes lujos de nuevo rico, como tener relojes de US$ 5,000 (igual que Nadine) e irse de vacaciones a lujosos hoteles de US$ 400 la noche y otros gustos igual de finos y caros.

Bueno, el que puede, puede. Vivir como rey no es algo que deberíamos reprocharle a nadie. Lo que en realidad asombra es el milagro de vivir así con una pensión militar y sin empleo.

Pero no es el único milagro conocido de Ollanta Humala. Otra igual de espectacular es el haber logrado desaparecer todas las denuncias que se le han hecho en los últimos años por diversas causas. Francamente es increíble comprobar el poder que tiene para esquivar las acusaciones y hasta las pruebas. Por ejemplo:

a) La payasada de Locumba en la que cometió una serie de faltas y delitos: secuestró soldados y hasta a un general, asaltó un campamento minero, se insubordinó con sus superiores, etc. Todo eso para pedir que Fujimori renuncie. De hecho, el cachaquito estaba tan desubicado que no sabía que Fujimori ya había convocado a elecciones y que Montesinos estaba en fuga. Aparte de sus delitos quedó como un perfecto idiota. Pero milagrosamente, salió de la cárcel con un indulto del pazguato de Paniagua, quien incluso lo premió con un cargo burocrático en el extranjero y un altísimo sueldo. Un gran ejemplo de la democracia para los militares que quieran hacerse famosos.

b) El andahuaylaso. Siguiente payasada de los dementes hermanitos Humala. Todo estaba preparado para que Ollanta regrese del extranjero como un mesías descendiendo del cielo, justo al día siguiente de pasar al retiro. El esquizofrénico de Antauro tomó la comisaría de Andahuaylas a balazos y en la trifulca murieron tres policías. Antauro debía leer el "mensaje a la nación" remitido por Ollanta via fax, pero el orate prefirió leer otro texto, hecho por él mismo, pues le pareció que el de su hermanito era muy blando. Si antes pidieron la renuncia de Fujimori, ahora querían la renuncia de Toledo. Está claro que los dos enfermos mentales, tanto Ollanta como Antauro, solo querían tomar el poder a toda costa. Ambos habían planificado el andahuaylaso igual que el locumbazo. Si bien en lo de Locumba no dispararon ni un solo tiro, esta vez Ollanta vio los muertos y se asustó. Entonces se hizo el loco y dijo que no sabía nada, demostrando que finalmente no es más que un cobarde. Por ello se ganó el asco de su propio hermano, quien nunca le perdonó haberle dado la espalda y abandonado en la cárcel. Esto hizo que Antauro cambiara de nombre al pasquín "Ollanta" y formara su propia secta de alucinados etnocaceristas. Los reproches a Ollanta no fueron solo de Antauro sino de toda su demencial familia.

c) La plata llega sola. ¿Cuántas denuncias de dinero malhabido en las cuentas de Ollanta y Nadine han salido a la luz? Varias. Por ejemplo, los famosos contratos que supuestas empresas le hacían a Nadine por sumas exageradas y por no hacer nada. Están los casos comprobados de dos empresas venezolanas, una arequipeña y otras varias fuentes oscuras de financiación, como las del Sr. Belaunde Lossio (diario La Primera). Pero como se trata de un ambiente privado, donde la gente puede regalar su plata si lo desea, no se puede hacer nada. Pero igual, todos estos destapes de plata sucia fueron silenciados por la milagrosa obra de Ollanta Humala. Algún extraño poder sobrenatural hay que tener para que la plata te llegue sola, y a montones. Y Ollanta tiene la concha de hablar de corrupción y de tráfico de influencias. Es para reírse.

d) Por supuesto, nadie dice nada del sueldito que los congresistas nacionalistas le pasan a Ollanta, como pago por el servicio de haberlos llevado al Congreso. Ahora que todos los medios saltan hasta el techo por las cuotas para las listas de candidatos al Congreso, hasta Ollanta Humala ha salido muy orondo a decir que Keyko y Castañeda subastan las curules. Ya nadie se acuerda de las denuncias que los mismos nacionalistas hicieron en la campaña municipal del 2006, según las cuales Patria Roja le habría pagado a Ollanta Humala US$ 100,000 dólares extraídos de la Derrama Magisterial para colocar a su gente. Eso y muchas cosas más. Además de tener una concha bien grande, Ollanta Humala es un caradura para acusar a otros de tráfico de influencias y de subastar curules. ¡Si vive de eso!

e) Madre Mia. A pesar de que diversos testigos lo han reconocido como el "capitán Carlos" y el autor de varias violaciones de los derechos humanos de una población, nadie ha tocado a Ollanta Humala ni con el pétalo de una flor, ni siquiera esa izquierda delirante que se rasga las vestiduras acusando a todos los militares. Nada. Es una contradicción total, un misterio. Ollanta dice que se rebeló contra la corrupción de Fujimori y Montesinos, pero lo hizo recién después de que el régimen se derrumbó. Siempre fue parte del ejército montesinista. Entonces la cuestión es simple: O bien Ollanta Humala actuó correctamente en la lucha antisubversiva y es una prueba de que no hubo una Política de Estado contra los DDHH, o es un criminal que ejecutó la Política de Estado del ejército montesinista y debería ser juzgado junto con el grupo Colina. Que se decidan.

En suma, para no cansar, es evidente que Ollanta Humala tiene algún extraño poder que lo protege. No es posible cometer tantas fechorías y salirse con la suya. No basta ser loco. Hasta me impresiona cómo lo trata la prensa nacional. Mientras que a otros candidatos los rodean como hienas con sus insolentes preguntas, los periodistas tratan con benevolencia a Ollanta Humala. Es muy extraño. ¿Habrá plata de por medio, como en la época de Montesinos? Algo tiene que estar pasando. Y como yo no creo en santos ni en milagros, me veo obligado a buscar una "explicación científica" a todos estos milagros ollantistas. ¿Cómo es que Ollanta Humala sale tan bien librado de todas sus fechorías y hasta por poco llega a ser presidente sin saber leer ni escribir ni hablar? De hecho, Ollanta Humala no es nadie. Aparte de ser medio demente, carece de formación, de experiencia y hasta de verso. Entonces hay una sola explicación razonable: lo utilizan.

¿Ollanta Humala es un santo que tiene poderes sobrenaturales para controlar los hechos de una sociedad? O es que aquellos poderosos que detentan realmente el poder, dentro y fuera de nuestro país, le están moviendo las fichas para que Ollanta haga su jueguito, avance y llegue a la meta. No sería la primera vez que los poderosos utilizan un fantoche para llevarlo al poder y luego hacer lo que quieren. Si no es esto, habría que pedir la beatificación de Ollanta Humala.

El último milagro de Ollanta Humala, que lo coloca junto a Fray Martín de Porres, ha sido lograr que perro, pericote y gato, en la izquierda peruana, coman del mismo plato. Increíble. Nunca se había dado este milagro. Ollanta Humala, cual pedazo de hez, ha logrado convocar en torno suyo a todas las moscas y moscardones de la izquierda peruana y hasta internacional. Ahora revolotean en torno suyo y se posan sobre sus hombros buscando una buena ubicación en sus listas parlamentarias. Muertos vivientes como Javier Diez Canseco ya están frotándose las manos. Seguramente la próxima versión de los congresistas humalistas será tan estrafalaria y variopinta como la actual. Cada vez que posan juntos parecen el afiche de los locos Adams.

Ollanta Humala es hoy el caballo de Troya de la izquierda. Gana Perú ha pasado a ser el relleno sanitario de la política peruana, el colector de todas las aguas residuales de la izquierda nacional, donde han confluido desde la CGTP hasta los caviares de La Católica, pasando por todos los revoltosos, agitadores y resentidos sociales, acomplejados comunistas, socialistas y proterroristas de diverso calibre. Desde luego, cuenta también con las simpatías de Sendero Luminoso, expresadas en su página web. Todos ellos han dejado por un momento sus banderas rojas con la hoz y el martillo, sus pancartas de Marx, Lennin, Mao y del Presidente Gonzalo, para levantar la antorcha roja de Ollanta Humala.

¿Cómo ha hecho Ollanta Humala todos estos milagros? ¿Es realmente tan bueno, tan inteligente, tan poderoso? ¿O no es más que el tonto útil, el idiota de la familia que todos usan para su propia conveniencia?

Creo que deberíamos tener mucho cuidado con estos fantoches y falsos profetas de los pobres. ¿Podrá Ollanta Humala controlar a todo ese zoológico que ha metido en su arca, en caso de llegar a Palacio? Lo dudo. Más que un santo milagroso, Ollanta Humala es un jinete del Apocalipsis.

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Escrito por

Dante Bobadilla Ramírez

Psicólogo cognitivo, derecha liberal. Ateo, agnóstico y escéptico.


Publicado en

En busca del tiempo perdido

Comentarios sobre el acontecer político nacional y otros temas de interés social